En una decisión drástica, Estados Unidos ha anunciado que no renovará las licencias para la importación de petróleo y gas de Venezuela, las cuales habían sido otorgadas con la condición de una mayor apertura democrática en el país sudamericano. La fecha límite dada por Washington para que el gobierno venezolano permitiera la participación de María Corina Machado, destacada figura opositora, en las elecciones presidenciales ha expirado sin cumplirse.
El Departamento de Estado de Estados Unidos expresó su profunda preocupación por la falta de acciones democráticas por parte del presidente Nicolás Maduro y su administración. La retirada de estas licencias tendrá un impacto significativo en la economía venezolana, ya que Estados Unidos es uno de los principales compradores de petróleo venezolano.
Esta medida representa un quiebre en las relaciones bilaterales y podría tener repercusiones tanto a nivel regional como internacional. El gobierno de Estados Unidos instó a la comunidad internacional a condenar las acciones del gobierno venezolano y considerar medidas adicionales para presionar por cambios democráticos.
El futuro de las relaciones entre ambos países y el impacto económico en Venezuela dependerán de cómo evolucione la situación en los próximos días.
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